Santiago
de Cuba, considerada como la capital del Caribe, es uno de los polos
turísticos más relevantes del país. Posee una
magnífica infraestructura hotelera, y una red de instalaciones
de playa y montaña. Su aeropuerto facilita los vuelos directos
internacionales.
Es la segunda ciudad más importante de la isla. Tanto es
así, que allí se celebra anualmente la Feria EXPOCARIBE
y el Encuentro de Hombres de Negocios.
Fuera de la zona urbana se encuentra el santuario de la Virgen de
la Caridad del Cobre, Patrona de Cuba, erigido en 1927, y que recibe
anualmente a miles de visitantes desde todos los lugares de la isla.
Uno de los sitios más visitados de la provincia es La Gran
Piedra, un sitio de singular belleza donde se encuentran orquídeas
silvestres y helechos arborescentes, gracias a un clima propicio
y en el que se destaca su mirador natural, constituido por una inmensa
roca de más de 1000 metros de altura sobre el nivel del mar,
que ofrece desde su cima una extraordinaria vista.
Santiago se ofrece esplendorosa al viajero con su mezcla de etnias,
que incorpora el legado físico y espiritual de los aborígenes
al componente español y africano. Otra nota distintiva de
este constante proceso de transculturación procede del asentamiento
de colonos franceses en este territorio a partir del siglo XVIII.
El carácter de los habitantes de esta región, donde
la hospitalidad y la alegría son rasgos primordiales, muestra
a la vez energía e innata rebeldía.
Los museos ofrecen testimonios de esta rica historia: El Museo de
la Piratería ubicado en el Castillo de San Pedro de la Roca,
construido por el ingeniero italiano Juan Bautista Antonelli; el
Museo La Isabélica, que guarda el testimonio de los asentamientos
franceses; el Museo Provincial Emilio Bacardí y otros que
conservan la historia más cercana: el Museo Histórico
26 de Julio, con sede
el antiguo Cuartel Moncada; la Granjita Siboney "de donde partieron
los revolucionarios para atacar el Cuartel"y el Museo de la
Lucha Clandestina donde se guardan testimonios de la heroica lucha
librada en las ciudades durante la última gesta. Asimismo
constituye un motivo de interés para el visitante, la Casa
Frank País, donde vivió este mártir santiaguero,
la Casa de José María Heredia, primer romántico
de las letras hispanas y la Casa de Antonio Maceo, héroe
de la guerra libertadora del siglo XIX.
Otro centro de veneración para todos los cubanos lo constituye
el mausoleo dedicado a José Martí, Héroe Nacional
de Cuba.
Los parques de esta ciudad constituyen verdaderos atractivos para
el visitante: el Parque Céspedes, centro de la vida santiaguera
alrededor del cual se acumula la historia. Allí se encuentra
la Catedral Metropolitana, una de las más antiguas de Cuba.
Notables bellezas naturales ofrece el Parque Baconao. Allí,
además del paisaje inusitado, puede visitarse el Museo de
Ciencias, un Acuario y un Delfinario junto al Valle de la Prehistoria,
con doscientas esculturas de piedra.
Si el viajero se adentra en las calles de Santiago, encontrará
la calle escalonada de Padre Pico o la calle Trocha, de donde brotan
los deslumbrantes carnavales. En ellos el color, la música
y el baile se conjugan para dar el ritmo genuino de este pueblo.
Acompañados por la trompeta china o la tumba francesa, los
cuerpos se mueven rítmicamente, al mismo tiempo que se desplazan
sin descanso por las calles, arrebatando a su paso a los espectadores.
Para completar este conjunto de atractivas ofertas culturales, Santiago
posee los cabarets Tropicana Santiago y San Pedro del Mar, el Teatro
Heredia y una sala de conciertos.
el antiguo Cuartel Moncada; la Granjita Siboney "de donde partieron
los revolucionarios para atacar el Cuartel"y el Museo de la
Lucha Clandestina donde se guardan testimonios de la heroica lucha
librada en las ciudades durante la última gesta. Asimismo
constituye un motivo de interés para el visitante, la Casa
Frank País, donde vivió este mártir santiaguero,
la Casa de José María Heredia, primer romántico
de las letras hispanas y la Casa de Antonio Maceo, héroe
de la guerra libertadora del siglo XIX.
